Durante su visita a Michoacán el Papa Francisco tuvo un pequeño altercado con uno de los presentes durante su recorrido en el estado de Michoacán, en donde el Papa fue jaloneado por uno de los feligreses a quien tuvo que llamarle la atención.
Mientras saludaba a niños y seguidores que lo esperaban con mucha emoción uno de ellos lo jala y por poco y tira al líder de la Iglesia Católica encima de quienes se encontraban a su lado.
El Papa perdió el equilibrio y estuvo a punto de caer, si no fuera por un niño que estaba en frente que lo ayudo a recuperarse. El Papa logró incorporarse y con molestia le repitió en varias ocasiones al feligrés “no seas egoísta” con una visible molestia en el rostro.
