Tras haber estabilizado la curva de contagios en China y comenzar a retomar la vida laboral, China acelera la detección de personas con fiebre, o posibles síntomas de coronavirus por medio de lentes especiales dotados con inteligencia artificial Rokid, que son utilizados por los guardias de seguridad en el Parque de Hongyuan en Hangzhou.
El dispositivo permite detectar imágenes térmicas para verificar la temperatura corporal de una persona desde una distancia hasta de un metro.
Las gafas tienen el objetivo de detectar la temperatura de cientos de personas cada dos minutos, según South China Morning Post.
Si se detecta que una persona tiene fiebre alta, el dispositivo utilizará su función de reconocimiento facial en vivo para enviar un mensaje automático y registrar la información digitalmente.
Sin embargo, el dispositivo, no puede detectar a las personas que están asintomáticas o a las que están infectadas pero que aún no han desarrollado ningún síntoma.
Además de la medición de la temperatura fija, este modelo de gafas puede proporcionar un control de temperatura portatil a distancia y rápido lo que los hace más precisos.
Equipado con un sensor infrarrojo y una cámara, las gafas permiten al usuario ver la temperatura de las personas.
También se han instalado sistemas de imagen térmica creados por la compañía SenseTime en las estaciones de ferrocarril de toda China.
