El Primer Grito de la Independencia del Presidente Andrés Manuel López Obrador fue austero y auténtico.
Con los 20 vivas que lanzó desde el Balcón de Palacio Nacional se escuchaba al pueblo contento, tranquilo y afable.
Una claro contraste de forma y fondo con los seis años de ceremonias del ex Presidente Peña Nieto que se distinguieron por la inconformidad de los mexicanos y el entorno poco favorecedor que lo acompañó durante los seis años que duró su gobierno.
El Primer Grito de López Obrador se distinguió por la cantidad de mexicanos que acudieron a acompañarlo en esta fecha simbólica para nuestro país y por la mención que se hizo de los héroes que nos dieron patria, la trascendencia de libertad y la democracia.
Y por la interpretación de la canción “La Paloma” interpretada por Eugenia León que entonó en el Zócalo capitalino iluminado con juegos pirotécnicos y que en su letra evoca a Villa y a Zapata, junto a la orquesta en donde se hace énfasis que México esta de Fiesta y en donde además recordó al maestro Francisco Toledo quien murió los pasados días en Oaxaca y que le hicieron unos arreglos en los que se incluyó hacer justicia a los estudiantes de Ayotzinapa, y que afirma que el cambio lo hace la gente.
