Tras poner su cargo a disposición el líder del PRD Carlos Navarrete aseguró que con esta decisión lo que busca es la transformación de su partido y a su vez invitó a que todos los dirigentes perredistas actúen de manera adecuada.
Una vez que tomó la decisión de presentar la evaluación sobre los resultados electorales del 7 de junio, en los que no le fueron favorables al partido que no alcanzaron ni el 11 por ciento de la votación nacional, el Consejo Político Nacional perredista pondrá el cargo de su dirigente a disposición de los consejeros, lo cual no implica de ninguna manera una renuncia sino que significa que se deberá de elegir si se debe o no renovar su posición, o si es mejor que entre otra persona al frente del partido.
Por el momento, el perredismo se encuentra en medio de una crisis, en donde las corrientes internas deberán negociar como podría darse la salida de Navarrete en caso de que esa sea la decisión del Consejo, y definir el cambio generacional que pudiera renovarlo en su momento.
El planteamiento que tiene el partido es de “relanzar al PRD”, con ello, el objetivo es generar una nueva manera de hacer las cosas, de transformar al partido, después de los resultados que han tenido en los últimos comicios electorales. Cambiar sus prácticas y evolucionar como fuerza política.
Hasta el momento no se ha llegado a una negociación interna que permita conocer quien podría ser el sustituto de Carlos Navarrete en caso de que salga de la diligencia del partido, sin embrago, se esta analizando la fecha para llevar a cabo el relevo antes del Congreso Nacional y con ello redefinir la línea política de su partido y flexibilizar las alianzas.
Los dirigentes de las diversas corrientes del perredismo están conscientes de que este movimiento es sumamente importante para que su partido se fortalezca y pueda seguir creciendo.
Algunos de los nombres de quienes podrían quedar al frente del PRD se encuentran Fernando Belauzarán, Beatriz Mojica, así como los senadores Zoé Robledo y Armando Ríos Piter.
