Una ola de ataques terroristas ha dejado como saldo más de 150 víctimas mortales y se calculan alrededor de 200 heridos, de los cuales 80 son de gravedad.
Seis tiroteos y tres explosiones en Stade de France y Saint-Denis han conmocionado a Francia y al mundo. Se investiga si hubo relación entre todos los acontecimientos.
Estos ataques terroristas han sido calificados como “los peores atentados de la historia de Europa y el peor episodio de violencia que se ha vivido en París desde la Segunda Guerra Mundial.”
El Presidente francés Françoise Hollande dio a conocer que su país se encuentra en Estado de Emergencia, por lo que cerró las fronteras para poder reforzar la seguridad necesaria en la capital francesa y desplegó a mil 500 militares en la ciudad de apoyo.
Confirman las autoridades francesas a través de su porta voz Thibault-Lecuivre, que son ocho los agresores que han sido abatidos por las Fuerzas de Seguridad.
Testimonios de personas sobrevivientes narran la toma de rehenes que se dio, del que más de 100 personas fueron asesinadas mediante tiroteos. Las personas que salieron ilesas de los atentados fueron trasladadas en autobuses de una sala de conciertos en París hacia un centro especial para atender crisis, con el fin de que les puedan brindar el apoyo físico y psicológico que se amerita.
Socorristas y miembros de la Cruz Roja atendieron a las decenas de heridos que fueron a la sala de conciertos de Batclan en donde se llevaba a cabo el concierto de la banda estadounidense Eagles of Death Metal.
La Prefectura de la policía en París pidió a los habitantes que no salgan de sus casas hasta que se den nuevas instrucciones a la población para cualquier posibilidad de violencia.
Los últimos ataque que se han vivido en Francia fueron los perpetrados en contra de la Revista Satírica Charlie Hebdo en el corazón de Francia en enero de este mismo año, así como el ataque a una tienda de alimentos Kosher, que dejo 20 muertos, ambos realizados por atacantes de grupos extremistas islámicos.
